Hay libros que te llaman por la portada y te atrapan por todo lo demás... aunque finalmente la portada no tiene tanto que ver con el contenido (esa mano está demasiado intacta como para pertenecer a alguien que hace trabajos manuales) y tampoco estoy muy de acuerdo con el final de la sinopsis.
No me parece que los personajes principales sean los que rompen los moldes y están comprometidos con el contexto; para mí, esos son los secundarios: Santiago, Teseo y sobre todo Lucrecia, de la que recibimos una primera imagen que es un espejismo y creo que es la que más evoluciona de todos.
Sí, me encantaron estos secundarios y varios de los demás; es que las motivaciones de Dimas me sonaron más a perseguir una causa que se convierte en otra y luego en otra más (y no siempre son compatibles entre sí) y Magdalena... si bien en el prólogo muestra cierto arrepentimiento por sus acciones pasadas, igual me faltó. Soy consciente de que ella al principio no tenía mucha consideración por los demás, hacia final sí y si de alguna manera pagó... esa no es la manera.
También es genial que las referencias históricas no están metidas de prepo; tiene la cantidad suficiente para situarnos en contexto y fluyen de manera natural con la historia que trascurre entre Chaco y Santa Fe a principios del siglo pasado... tiempos bastante convulsionados (para no perder la costumbre).
Como dije al principio, me crucé con el libro de casualidad y supuse que iba a disfrutarlo.
¡Qué bueno cuando los instintos no están errados!